ELEMENTOS DE LA CONDUCTA HABILIDOSA
La forma en que miramos es muy importante cuando nos relacionamos con los demás. Debemos mirar a una persona a los ojos o a la zona superior de la cara (zona que rodea los ojos). Si miramos a quien hablamos o escuchamos conseguiremos mayor respuesta que si estamos mirando hacia otro lado. Esto es indicativo de que seguimos la conversación y de que nos interesa. Sin embargo hay que tener en cuenta que un exceso de contacto ocular muy fijo y continuo puede resultar molesto a nuestro interlocutor. Si retiramos la mirada estamos indicando desinterés, timidez, sumisión o sentimientos de superioridad.
La distancia interpersonal
Existen distintas zonas:
a) Distancia íntima (0-50 cm): en esta zona se sitúan las personas amadas y familiares.
b) Distancia personal (50-125 cm): es el espacio personal de cada uno, una especie de esfera protectora que nos gusta mantener entre nosotros y el resto de los individuos.
c) Distancia social (1,25-3,5 m): es la distancia que se mantiene para trabajar en equipo o en relaciones sociales ocasionales.
d) Distancia pública (más de 3,5 m): es la que nos gusta mantener con los desconocidos (por ejemplo al caminar por la calle).
Hay situaciones en las que no se respetan estas distancias. Si una persona se sitúa en un tipo de distancia que no le corresponde entonces nos sentimos incómodos. Esto se produce en los dos sentidos, tanto si un desconocido se sitúa en nuestra distancia personal como si una persona muy cercana (por ejemplo nuestro hermano, hermana, primo, etc.) se mantiene alejado de nosotros y evita el acercamiento.
La postura
La postura es la posición que adoptan los miembros (brazos y piernas) de una persona con respecto al cuerpo, lo cual influye en la relación con otros. La postura de nuestro cuerpo es algo que nuestro interlocutor percibe a simple vista y por tanto hay que cuidar. La inclinación de nuestro cuerpo hacia la persona con la que hablamos es una muestra de atención y acercamiento, mientras que estar echado hacia atrás en la silla indica desinterés o rechazo.
¡CRUZAR LOS BRAZOS ESTÁ PROHIBIDO!. Tener los brazos cruzados se asocia con una actitud defensiva, mientras que la distensión y relajación de los brazos trasmite una actitud confiada. El mantener una conversación con alguien que tiene los brazos cruzados puede indicarnos que esa persona no pretende cambiar sus planteamientos.
http://w3.cnice.mec.es/recursos2/e_padres/html/aprender_mejorar_habilidades.htm